En un artículo anterior te comentamos como prepararte para una lectura de Registros Akáshicos en la cual recibes información a las preguntas concretas que tú haces y en muchas ocasiones, también se recibe información adicional necesaria en ese momento.
Esa información que recibimos es para hacernos responsables y conscientes del momento presente.
Las preguntas que formules a tus Registros Akáshicos son el fundamento de esta técnica ya que las respuestas que te den tus Maestros, guías y seres queridos te orientarán hacia tu esencia, a la mejor versión de ti mismo, hacia la abundancia en tu vida y paz y felicidad plenas.
Los mensajes que recibimos nos muestran de dónde venimos y las posibilidades que tenemos para superar esa prueba o seguir repitiendo una y otra vez.
La lectura nos da pautas para sanar esas situaciones que en este momento nos preocupan, nos bloquean, nos lo hace consciente y nos muestra la responsabilidad que tenemos en nuestras acciones pasadas, presentes y futuras.
El Registro Akáshico también educa, puedes pedir a tus Maestros y Guías que te enseñen un concepto o que te ayuden a corregir una idea equivocada que tengas sobre algún tema. Muchas veces el ego siente que sabe con certeza algo, y la realidad es otra muy distinta.
En una lectura de Registros Akáshicos sanamos porque recordamos al alma su recorrido por la existencia. Es un recorrido muy largo, de muchas vidas y experiencias donde hemos acumulado traumas, bloqueos, lazos kármicos y también fortalezas, aprendizajes realizados, dones y cualidades.
En una lectura, leemos los mensajes del alma, allí están todas nuestras respuestas. Se conectan las almas del lector con la del cliente y se pasan la información, el lector solo es un canal. Esa información llega sin juicio, sin máscaras, sin autocrítica. El mensaje es puro y luminoso. El lector por lo tanto debe ser un canal limpio sin juicios.
En una lectura la información llega de diferentes maneras, puede llegar una frase sin sentido para el lector, una imagen, una sensación, un sentimiento. El lector transmite tal cual, sin interpretar, sin juicio, el cliente lo entiende porque es un mensaje para él. En alguna ocasión el cliente dice que no entiende, pero su alma si la ha entendido y en unos días esa sanación habrá ocurrido.
En una lectura podemos captar sus vidas pasadas, su camino entre vidas, sus contratos familiares, porque elegiste esa familia para desarrollarlo.
A veces el consultante pregunta y pregunta, insiste sobre un tema porque cree que no le han respondido o quiere una respuesta concreta. Los guías transmiten solo lo necesario en este momento, nos responden a lo que debemos saber para nuestro bien, no lo que queremos oír.
Muchas veces queremos que nos “adivinen el futuro”, los guías nos responden a lo que en este momento necesitamos, el aquí y ahora, depende de lo que hagamos ahora será nuestro futuro, cuando recurrimos al pasado es para transformar el ahora y tener un futuro mejor. La sanación siempre es en el presente, si transformamos el aquí y ahora, el pasado y el futuro se sana.
La única manera posible de sanar es conociendo la verdad, por eso en una lectura de Registros Akáshicos se busca la verdad del alma, no es válido matizar la respuesta por dura que sea, lo único que queremos es sanar y solo es posible con la verdad.
A veces hay “verdades incómodas” que podemos escuchar en una lectura de Registros Akáshicos, racionalmente no le encontramos la utilidad, pero el alma la reconoce, le recuerda los caminos transitados para no repetirlos innecesariamente... También hay “verdades positivas”, esos dones que tenemos y quizás no recordamos, pueden encontrarse escondidos detrás de problemas que necesitamos conocer para avanzar.
La información que recibimos en una lectura de Registros Akáshicos necesita tiempo para procesarse, la verdad impacta y nuestro cuerpo emocional y mental debe procesarlo, no se sabe cuánto tiempo, depende de la persona, del conflicto, pueden ser días, semanas, meses e incluso años por eso la solución al conflicto los guías la dejan en el aire, cuando llega el momento de cada uno tiene sentido, el recurrir a una lectura de Registros nos lleva a una Sanación Akáshica, donde iluminamos esos aspectos poco claros para que el consultante tome consciencia y pueda trascenderlos.